Los Sydneysiders viven intesamente el océano. Salir a dar una vuelta en barco es algo muy normal... y no exlclusivo de pudientes, los precios de embarcaciones son muy asequibles, al igualq que las marinas (puertos deportivos)... por otro lado siempre está la opción de compartir barco con algunos amigos. Entre tres o cuatro hacen el desembolso para un barquito de segunda mano... y se reparten los fines de semana en los que salir por el Sydney Harbour...
Mientras tanto relaaaaje... que dicen los argentinos...